¡Por fin! Es la única forma que se me ocurre de empezar este artículo, y es que los jugadores se han unido por una causa, por una buena causa, aunque tendría que decir por una causa indispensable, ya que el fútbol ha entrado en una dinámica muy mala, que podría llegar a su desaparición, aunque parezca una locura.
El problema es que los equipos se han acostumbrado a ofrecer contratos millonarios y no pagarlos, entre otras cosas porque no tienen dinero en las arcas, pero al final se meten en una ley concursal y se arregla todo, para ellos. Los clubs se ahorra muchos millones de ficha gracias a esta ley, que tan solo le influye a la hora de fichar jugadores, porque no descienden de categorías, ni les resta puntos en la clasificación, así que les sale barato.
Esta huelga tiene que servir para que los jugadores demuestren su fuerza y para que clubs, incluso televisiones, piensen en rectificar, ya que se están cargando el fútbol poco a poco, y lo que era un deporte, y para muchos una forma de vida, se ha convertido en una locura y la ruina para muchos.
